Un adecuado tratamiento antiparasitario es crucial

Las pulgas son un vector de enfermedades zoonósicas. Hablando en plata, son enfermedades que se transmiten desde los animales domésticos hacia el hombre y viceversa. Las formas de transmisión son muy diversas y a veces complejas.

Dicho esto, para combatir estos parásitos lo más importante es que las familias estén bien informadas sobre los síntomas de estas enfermedades, la prevención y el correcto tratamiento antiparasitario en sus mascotas.

Los animales de compañía nos pintan la vida de otro color, pero también nos exigen ciertas responsabilidades para con ellos. Y el control de plagas de pulgas es una de esas responsabilidades.

Infestación de pulgas en Canarias

Más del 40% de las pulgas de los perros de Canarias tienen Rickettsia. Esto es revelador, pues significa que hay una probabilidad de que, cada dos perros con pulgas, uno contraiga enfermedades que estas contienen.

Como datos más específicos, la pulga del gato Ctenocephalides felis es la principal causa de enfermedades causadas por bacterias como: Bartonella henselae, Bartonella clarridgeiae y Rickettsia felis.

¿Qué enfermedades pueden transmitir las pulgas?

Las pulgas pueden ser portadoras de bacterias que causan enfermedades en los humanos, como el tifus y la peste. Es a nuestras mascotas a las que suelen dar más guerra.

«Grupo de enfermedades rickettsiosis»

Son producidas por bacterias pleomorfas, y actúan como parásitos intracelulares. Aunque estas enfermedades son raras en nuestras islas, los viajes internacionales suponen un riesgo de aparición en el archipiélago. Las características generales de estas enfermedades, así como las rickettsiosis más importantes transmitidas por piojos, pulgas y ácaro son la fiebre de las Montañas Rocosas, la fiebre botonosa mediterránea, la fiebre Q y la ehrlichiosis.